LAS SIAMESAS EN ABC

Después de meses de intenso trabajo, las siamesas Sara Li y Ana K han inaugurado su restaurante lounge bar. Hemos hablado con ellas y nos han descubierto las claves de este nuevo proyecto. Además han desvelado, en exclusiva para ABCD, la receta de sus deliciosos hombrecitos, por supuesto hechos con los nuevos productos de su tienda.
Las Golosas, dueñas de la fábrica de conservas agridulces y de su tienda de delicatessen, confiesan que sus madres son las responsables de su amor por la comida y el ser humano. Las hermanas han convertido un acto tan básico como es comer en un auténtico arte lleno de contradicciones, excesos, superabundancia, gula y desnutrición.

1. ¿Cómo y cuando surgió la idea de abrir vuestro propio restaurante?
Estábamos releyendo las meditaciones de gastronomía trascendente de Brillant-Savarin y una frase no nos dejó dormir en varios días: “la invención de un nuevo plato hace a la humanidad más feliz que el descubrimiento de una nueva estrella”. Como sabes, nuestro objetivo en la vida es dar amor y hacer felices a todos cuantos podamos, así que pensamos que un restaurante sería el lugar perfecto para completar nuestra obra.
2. ¿Cómo definirías vuestro restaurante?
Nuestra cocina es una cocina creativa, de autor pero con fuertes raíces en la tradición más ancestral.
3. ¿Cuál es el secreto de vuestro éxito?
Sin duda el secreto de nuestro éxito radica en la mezcla de medicalización y sobrealimentación que ofrecemos. Además del amor que brindamos a todos nuestros clientes, y no es sólo por generosidad y buen corazón, también hay que pensar que el comensal de hoy bien podría ser un bocado exquisito el día de mañana.
4. ¿Por qué cada visita a vuestro restaurante es única e irrepetible?
Bueno, desde el principio tuvimos claro que la investigación y la innovación lo era todo en un restaurante que aspira a una estrella Michelín. Así que cada día presentamos productos y recetas nuevas y mantenemos vivo el espíritu de “la primera vez”.
5. ¿Qué estáis investigando en estos momentos?
Nuestras nuevas creaciones han partido de la investigación de los productos que nos ofrecen los medios de comunicación: como el caldo de abuela hecho con un gran manojo de recuerdos de la infancia, unas gotitas de tradición casera, con tropezones de salud y aderezado con unos toques de modernidad y un potente sabor a auténtico. También está nuestra ensalada disfrazada de amor, hecha con rodajas de sexo, tiras de juventud y belleza y un salteado de hiperactividad. O nuestro vino espumoso hecho con uvas de fama, cultivadas en viñedos de conciencia social, fermentado en barrica de éxito y ligeramente aromatizado con poder y dinero.

6. ¿Qué papel tenéis cada una de vosotras en este nuevo proyecto?
La verdad es que somos un tandem perfecto pensamos y actuamos igual, así que todo fluye felizmente, sin contratiempos, sin peleas, sin disgustos, ni otras molestias.

7. ¿Qué significa para vosotras ser cocineras?
Ser cocineras ha sido para nosotras algo muy sencillo. En realidad no hay más que salir a la calle, verlo todo con ojos de cocinero y dejar volar la imaginación. Si estamos sentadas en una terracita y vemos pasar a un alegre oficinista obeso pensamos “mira que tocinillos de cielo tan exquisitos”, si en cambio pasa una flacucha dependienta “mira que lengua estofada más deliciosa”. En fin, se podría decir que tenemos el cerebro en el estómago.


Publicado el sábado 6 de marzo en ABCD